La Agogé Espartana

"En otro tiempo advertí que, siendo Esparta una de las

ciudades estado menos pobladas, era evidentemente

la más poderosa y célebre en la Hélade,

y me pregunté cómo pudo ocurrir eso.

Pero después que reparé en las costumbres de los espartíatas,

ya no me sorprendí por más tiempo."

(Jenofonte, La República de los Lacedemonios).

En primer lugar voy a explicar un poco lo que es la agogé o educación espartana, sus etapas en la vida de los varones y como afectaba esta educación sobre el resto del sistema de Esparta.

La Agogé era el sistema educativo de Esparta. Denominada por Plutarco como "escuela de obediencia", era contraria a la educación cultural y actual, y desarrollaba las cualidades físicas y militares. La Agogé era obligatoria para todos los ciudadanos de Esparta, salvo para el rey.

A través de lo que he podido ver en el trozo de película de 300 y lo que he sacado en conclusión, este sistema de educación era un sistema cuya principal herramienta era la violencia. Esta se utilizaba durante todo el proceso de aprendizaje ya que con ella de intentaba crear las bases de la fuerza, el poder y la superación. Era indispensable, y porqué no decirlo, eficaz ya que terminaba consiguiendo sus objetivos.

Durante el proceso de aprendizaje, los jóvenes son excluidos del cuerpo cívico, de la ciudadanía. Se les inculca que merece la pena anteponer el bien común a la gloria personal. Debe fomentarse una conducta austera en todos los ámbitos de la vida: una dieta espartana (diatia), sobriedad en todo, etc. y cualquier atisbo de arrogancia es desterrado. La Agogé enmascaraba las desigualdades sociales existentes en la Esparta arcaica.

El hecho de que los jóvenes fuesen apartado de su familia y de su entorno habitual era para desarrollar así un carácter más violento y no estar influido por el cariño y la “debilidad” que le aportaba, sobre todo, su madre.

De esta forma, puedo sintetizar un poco mostrando ahora cuales son las características principales de la agogé:

-Sistema OBLIGATORIO: Era un requisito indispensable para la plena ciudadanía. Para Jenofonte, aquellos que no habian pasado por la agogé eran ciudadanos de categoría inferior que no podían acceder a las magistraturas ni a los cuerpos de élite o, según Plutarco, eran directamente privados de sus derechos ciudadanos.

Era tanta la influencia de la agogé sobre los ciudadanos de Esparta que esta se infiltraba hasta en los derechos de las personas y en su juicio como persona inferior o superior. Quien no se sometia a la agogé eran considerados personas inferiores con muchas privaciones. Por otra parte, hay que afirmar que cuando un niño nacía con alguna discapacidad, más pequeño de lo “normal” o con algun problema, era <<eliminado>>, es decir, se desacian de ellos matándolos ya que eran considerados un estorbo que no tenía ninguna validez, puesto que no llegarían a defender a Esparta de la misma manera que lo haría un niño sano. Esto, a mí parecer, me parece bastante cruel.

-Sistema COLECTIVO: En contraposición a la educación personalizada con un preceptor esclavo, al estilo de otras ciudades griegas, la agogé se estructuraba en etapas para grupos de niños de edad similar.

En cada etapa, los niños eran todos de la misma edad, y no solo eso, si no que todos contaban con el mismo físico, la misma vestimenta, el mismo pelado, etc. Esa era la imagen propia de la agogé espartana por lo que no podía haber diferenciaciones.

-Sistema ORGANIZADO POR EL ESTADO: Era el propio gobierno de la ciudad el que gestionaba la educación pública como una de sus principales misiones. Además de contar con magistrados especializados, los éforos llevanban a cabo personalmente una supervisión diaria.

Esto implicaba que fuese un sistema muy estructurado y sistemático, dónde las etapas estaban bien definidas.

A continuación, voy ha hablar sobre estas etapas y que se hacía en cada una de ellas.

-Desde su nacimiento hasta los 7 años: Esparta implantó una estricta “eugenesia”, destinada a lograr niños sanos y fuertes. Nada más que nacían, el niño era examinado por una comisión de ancianos en la “Lesjé”, para determinar si era hermoso y robusto. Si era al contrario, se le llevaba al “Apóthetas”, una zona barrancosa al pie del Taigeto, donde se le arrojaba o abandonaba en una cima. Con esto, se buscaba eliminar así toda boca improductiva, es decir, toda persona que fuese incapaz de servir a Esparta. Si el niño (o la niña) superaba la prueba, era devuelto a su familia para que lo criase. Durante su estancia en el ámbito familiar no se mimaba al niño. Se instruía especialmente a las nodrizas para que lo criaran sin pañales que constriñesen su crecimiento o debilitaran su resistencia al frío y al calor. Al niño pequeño se le prohibía toda clase de, caprichos o rabietas, y debía acostumbrarse a estar solo y a no temer a la oscuridad. Era también costumbre bañarlos con vino, pues existía la creencia de que provocaba convulsiones, haciendo que las naturalezas enfermizas desaparecieran enseguida y fortaleciendo, en cambio, las sanas. Creencia posiblemente debida a que, en aquella época, el vino se enriquecía con drogas alucinógenas capaces de penetrar la piel e incluso de provocar la muerte por sobredosis.

Además, con esta edad se les enseñaba a que no debían retirarse jamás y a soportar fuertemente el dolor. Hasta esta edad, los niños recibian la educación espartana en el hogar, ya que era el padre el que lo instruía y le pegaba.

-Desde los 7 hasta los 20 años: A los siete años, los niños espartanos abandonaban su casa y quedaban bajo la autoridad de un “paidónomo”, magistrado especializado que supervisaba la educación. De esta forma, se integraban en una “agelé”, especie de unidad militar infantil, bajo el mando de un muchacho mayor, el “irén”(de diecinueve años cumplidos). Aprendían entonces a leer y a escribir, así como a cantar. Pero lo esencial de su formación consistía en endurecerlos físicamente por medio de la lucha y el atletismo, y en aprender el manejo de las armas, a marchar en formación y, por encima de todo, a obedecer ciegamente a sus superiores y buscar siempre el bien de la ciudad.

El Estado asumía la tutela hasta los veinte años. Durante la infancia, todo el énfasis se ponía en el rigor y la disciplina. Estos dos principios son la quinta esencia de lo espartano. A los niños se les cortaba el pelo al rape, iban habitualmente descalzos, etc. De hecho, la mayor parte del tiempo iban desnudos y mugrientos, porque raramente se les permitía bañarse. Las raciones de comida se reducían al mínimo imprescindible, lo que les obligaba a robar si querían evitar el hambre o así se lo mandaba su “irén”. Dormían en un lecho de cañas recogidas en el Eurotas, que debían cortar a mano ellos mismos, sin herramientas de ninguna clase. Pese a todo, los niños y jóvenes contaban con servidores que les atendían, salvo durante la Krypteia. Al convertirse en efebos (hacia los quince años) se dejaban el cabello largo propio de los soldados, limpio y perfumado, en honor de la opinión atribuida a Licurgo.

Toda la ciudad velaba por la disciplina de los jóvenes. Cualquier ciudadano o compañero de más edad podía reñir a los niños o sancionarlos con castigos físicos: hacerles pasar hambre, morderles el pulgar, azotarlos, etc.

Durante la adolescencia, se ponía especial énfasis en el “aidós” . En la primera edad adulta se insistia de modo particular en la emulación y la competencia, principalmente para llegar a ser uno de los "Hippeis". A partir de los veinte años, los jóvenes espartanos seguían viviendo en un régimen de cuartel y formaban los grupos de “sfareis” (jugadores de pelota). Todo este entrenamiento hacía de los espartanos los soldados más temidos de Grecia y figuraban, probablemente, entre los mejores combatientes de la Antigüedad.

Para entrenar el físico, aparte de los castigos y prácticas comentadas con antes, lo más frecuente era apalearlos. El lugar de apaleamiento se encontraba ubicado en un bosque al que podía acceder cualquier ciudadano de Esparta. Lo primero que se hacía era escoger un árbol vigoroso y robusto, al cual se le enganchaba una cadena -en el tronco- y a ésta un palo. Lo que hacía el muchacho era agarrar este palo mientras otros dos de sus compañeros lo apaleaban. Esta acción se llevaba a cabo con varas de bambú, puesto que dolía, picaba y desgarraba la piel. Por si el muchacho se caía de agotamiento o de dolor había otros dos compañeros que se encargaban de levantarlo para que pudiesen seguir apaleándolo.

Esta práctica aparece reflejada en la película cuando el niño aparece agarrado a una columna y por detrás hay otros compañeros que le golpean violentamente.

La finalidad de este ejercicio era, para el que apaleaban, aprender a aguantar y soportar mejor el dolor. Para los que golpeaban, era no detenerse ni vacilar en el ataque aún cuando se sentía el terrible dolor que estaba sufriendo el enemigo. Y en tercer y último lugar, los que sujetaban, la finalidad era que aunque viesen sufrir o incluso morir a sus compañeros en combate continuasen con la misión que les había sido encomendada por sus superiores. Esta práctica no se realizaba como castigo, sino que se hacía de forma aleatoria entre los componentes del campamento, aunque éste también era el castigo que recibían los muchachos a los cuales se les sorprendía robando.

Cuando el que estaba recibiendo el castigo tenía el cuerpo demacrado se le retiraba, pero a no ser que se encontrase muy herido no se le curaban las heridas. Había casos de jóvenes tan arrogantes que por no sucumbir al dolor y por no caer a los pies de sus compañeros preferían morir. Sus cuatro compañeros -los que apaleaban y los que sujetaban- no podían interrumpir la ceremonia, tan sólo podían aconsejar a su compañero que se soltase. Pero si este decidía no hacerlo se proseguía con la ceremonia hasta arrebatarle la vida.

Finalmente, cuando acababa el proceso de aprendizaje a los 21 años, el joven era abandonado a su suerte en un determinado lugar, además de tenerse que enfrentar a una bestia (un lobo en el caso de 300). Si lograba soportar todas las penurias y vencer a la bestia volvería y se habría convertido que un verdadero guerrero...”O vuelve como espartero, o no vuelve”...mientras que si no lograba estos cometidos, no sería aceptado. En muchas ocasiones, los jóvenes de Esparta morían en esta prueba de evaluación, por lo que si alguien no volvía, ya sabían cual había sido su suerte...

Tras haber leído y visto como estaba formado este sistema educativo puedo decir que es un sistema que corresponde a la educación FORMAL ya que va desde la educación primaria cuando son pequeños hasta la educación superior, que finaliza a los 21 años cuando se le plantea la prueba final dónde se llevará a cabo su evaluación, es un sistema totalmente intencionado deliberadamente, es decir, no surge de la nada si no que tiene unos propósitos determinados y bien estructurados, es sistemático, es decir, que sigue unas pautas y etapas como ya he explicado antes, esta educación se correspondería con el currículum oficial de cada individuo, y tiene un calendario y horario definido, es decir, que no se instruía a los jóvenes cuando ellos quisieran si no que todo estaba bien cuadriculado. También hay que añadir que la encuadraría dentro d la educación formal puesto que además de estar totalmente planificada, es una educación reglada, dónde cada regla tiene un papel fundamental.

Bajo mi punto de vista creo que no tiene ningún rasgo de los otros dos tipos de educación y creo que es la más pura educación formal y la que mejor sigue sus características.

En cuanto a los elementos del currículum presentes en este tipo de sistema educativo caben destacar los siguientes:

El primero de ellos sería el grupo de destinatarios o agentes. Este es un grupo homogéneo ya que este sistema se vale de grupos de iguales. Estos grupos son niños de entre 7 y 21 años, robustos, sanos, pelados al rape y muy violentos, ya que conciben la violencia y la fuerza como el más preciado tesoro. ¿Porqué ocurre esto? Porque si no fueran fuertes, resistentes al dolor, sanos, etc, no serían aceptados por la sociedad espartana. Son criados desde pequeños en la más pura violencia y en las peores condiciones. Todos estos niños tenían las mismas necesidades y expectativas, llegar a ser un buen espartano. Además, a estos niños se les inculcaba la idea de colectividad que daba lugar a proteger el bien común (Esparta). Esto también hacía que los niños no aprendiesen por si solos, si no en grupo ya que todos tenían que hacer lo mismo. Parace duro y dificil de asimilar pero sí... así era.

En segundo lugar vendrían los objetivos. El principal objetivo de la agogé espartana es instruir a los hombres de la forma más dura posible para hacer de esta forma hombres sin ningun tipo de debilidades que puedan soportar hasta las más duras penurias (frío, golpes, e incluso a tentar a la muerte si mostrar el más mínimo gesto de debilidad o dolor). Además de esto, otro objetivo muy importante era conocer las formas de lucha, la utilización de armas, las estrategias, competencias, etc propias de los espartanos.

Por otra parte, los contenidos serían los conocimientos que tenían los instructores que les pegaban y los formaban en el agogé a cerca de cuales eran las técnicas de lucha contra los ejércitos enemigos, sobre como tratar a los niños y jóvenes para que no sintieran dolor ni compasión en ningún momento de su vida, y sobre todo, los conocimientos que adquirian los jóvenes tras haber sido aceptados por la agogé al evaluarse, los cuales utilizaban después para enseñar a sus propios hijos en el hogar hasta que estos cumplieran los 7 años. En la película, esto queda reflejado cuando el rey Leonidas aparece al final de fragmento luchando con su hijo mientras su madre está observándolos. Una frase que me impactó bastante fue “ el miedo siempre está presente, pero afrontarlo te hace más fuerte”. Esta educación llevada a cabo por los padres con sus hijos en el hogar también era una educación formal, pese a llevarse a cabo en el hogar familiar.

Respecto a la metodología, esta se basaba principalmente en el conductismo ya que en ella existía un refuerzo positivo si hacía las cosas bien (volver a Esparta vivo) y un refuerzo negativo (le pegaban) si mostraba dolor, compasión o se debilitaba. Además, es una metodología de contacto ya que los instructores pegaban a los niños constantemente y nada se intentaba enseñar “ por las buenas”, si no que en todo momento se recurría a la violencia para enseñar algo.

En cuanto a los recursos, estos eran principalmente la autoridad que tenían los instructores sobre los niños y jóvenes durante el proceso de enseñanza de la agogé y la autoridad que tenían las personas a las que se les entregaban los niños al nacer para seleccionarlos como “aptos”. Estos últimos, debían contar con una fuerte autoridad ya que sobre ellos cargaba el peso de la buena elección de niños.

Por último, se encuentra la evaluación. Esta consistía en una prueba que determinaba el fin del proceso de enseñanza del espartano. Tal y como se ve en la película, el joven era abandonado a su suerte en un lugar desierto, pasando frío y pudiendo ser matado. Si lograba pasar esa etapa, tendría que enfrentarse a una bestia ( en este caso un lobo) y si conseguía acabar con él debería volver a Esparta con la piel del lobo como señal de su victoria. Por el contrario, el joven sería asesinado y jamás volverían a saber de él. Si volvía con la piel del lobo habría completado el proceso educativo y ya se habría convertido en un buen espartano, pudiendo incorporarse al ejército.

Tanto los objetivos, como la metodología, como la evaluación son elementos del currículum que están perfectamente coordinados en la educación agogé.

Además, en la película se puede observar como no solo los espartanos debían pasar la prueba, si no que después su deber era transmitirle estos conocimientos a los demás. Esto se conoce como “transferencia de aprendizaje” y quiere decir que además de aprender un conocimiento después hay que saber aplicarlo, es decir, tenemos que aprender a transferir.

Tambíen, es muy importante no dejarme en el tintero nombrar la idea de “proceso de socialización educativa” que es cuando pasamos de tener miedo a algo a después hacerlo nosotros mismos. En este caso sería cuando los niños sufren el dolor de cuando les pegaban y les hacían pasar lo peor después ellos mismo de mayor se lo hacían a sus propios hijos a través de la educación formal institucionalizada en su propio hogar.

Cabe decir también que el proceso contrario a este sería la “institución libre de enseñanza” en la cual se forma individualmente a cada persona, las cuales cuentan cada una de ellas con un pensamiento diferente. Esta institución sería la actual viviendo en democracia

Finalmente, mi opinión acerca de este modelo de enseñanza la supe desde el primer momento en el que empezé a escribir esta entrada. Bajo mi punto de vista esta es el peor sistema de educación en lo que respecta a los derechos humanos y a la vida de las personas, pero una de los mejores en eficacia. Es totalmente cierto que es una educación muy dura, asombrosamente violenta, llena de fuerza, vacía de sentimientos, aunque no de todos, porque el único sentimiento por el k velaban era Esparta, cruel, machista, marginal y totalmente contraria a lo que hoy en día se entiende por educación de valores, pero hasta hoy, es el modelo de enseñanza-aprendizaje más eficaz que conozco. ¿El fin justifica los medios? Para los espartanos sí, hoy en día en absoluto si los medios significan ir en contra de los derechos de una persona.

Sí, es eficaz pero... ¿Lo eficaz es bueno?. No, en absoluto. Metodologías como la de la agogé han dado lugar a ciertas culturas como la nazi creando de esta forma asesinos en serie. Además, es muy peligrosa ya que con esta forma de educación cualquiera puede hacerte pensar como él quiera, anulandote así como persona.

Después de todo esto, he llegado a la conclusión de que este sistema de educación es principalmente academicista puesto que he logrado comparar todos sus elementos del curriculum con los propios de este modelo, pero además también tiene una parte de conductista al poseer refuerzos positivos y negativos.

Finalmente, sí, es un modelo de enseñanza eficaz, pero en absoluto es bueno.